El proyecto Memorias Productivas plantea la recuperación de la antigua Estación Internacional de Canfranc, para su transformación en un centro de desarrollo local. Se busca el aprovechamiento de los recursos locales y la integración en un entorno natural para crear un espacio donde el ocio y el empleo se unen para reactivar el pueblo.
En 1928 se inaugural en Canfranc (Huesca) la que sería la segunda estación más grande de Europa y tercer punto de conexión ferroviaria con Francia. 42 años después (en 1970) un accidente de ferrocarril provoca el cierre del tráfico internacional y el inicio de la decadencia tanto de la estación como del pueblo que había surgido para darle soporte.
Desde el cierre de la estación Canfranc ha ido reduciendo su población paulatinamente y en la actualidad menos de 550 personas se distribuyen entre sus dos núcleos poblacionales. Encontramos un clima de alta montaña con temperaturas por debajo de los 0ºC durante 8 meses al año y con la pérdida de su principal motor económico el pueblo se ha volcado en el turismo de montaña, pero la estacionalidad a la que se ve sometido provoca que no sea suficiente para su mantenimiento y necesita de un nuevo modelo económico que lo complemente.
La propuesta plantea la recuperación del conjunto ferroviario como centro de desarrollo local basado en la producción forestal y el desarrollo empresarial como complemento al turismo que se desarrolla en la zona, utilizando los recursos locales y buscando tanto la preservación del patrimonio como la integración en el entorno natural en el que se encuentra.
De esta forma se busca la unificación del pueblo con la estación, atrayendo hacia el espacio ferroviario tanto a la población local como a los visitantes y uniendo el ocio con el trabajo como estrategia principal para conseguir un proyecto sostenible a largo plazo.
Por un lado, la transformación de la plataforma ferroviaria plantea la integración paisajística a partir de un proceso de reapropiación natural que ha ido surgiendo de forma espontánea a raíz del abandono, de forma que la vegetación se orienta en lugar de luchar contra ella y conforma un medio híbrido entre natural y antropizado donde las antiguas vías estructuran un espacio que fluye entre el verde.
Este espacio público natural se complementa con la transformación de los edificios que componían la antigua estación y donde destacan el edificio de viajeros que albergará espacios de alojamiento temporal y de desarrollo empresarial además de lugares de actividad cultural y la Fábrica de árboles, que ocupará la primera de las antiguas naves de carga y generará un espacio de investigación y producción forestal donde las actividades productivas se combinan con las lúdicas estableciéndose sinergias y puntos de encuentro entre los diferentes usuarios que darán vida a esta nueva industria que proporcionará un nuevo modelo económico que permitirá una nueva fase en el desarrollo de Canfranc.
Tutores: IVÁN CAPDEVILA (Proyectos Arquitectónicos) + CARLOS BARBERÁ (Composición Arquitectónica) + ÁNGEL B. GONZÁLEZ (Construcciones Arquitectónicas)