En el año 2000, el desprendimiento del iceberg B15 de la isla de Ross, supone un shock para los científicos y el punto de partida del cambio climático. El iceberg con el tamaño de Jamaica, supone el mayor desprendimiento de hielo de un glaciar hasta la fecha. Estos conforme se van fragmentando van adquiriendo una letra a su número. Cada uno de ellos está perfectamente monitorizado por varios satélites, por su peligro para la navegación y para estudiar el proceso de hielo y deshielo de la Antártida.
El proyecto parte de la elección del iceberg B15R como objeto de estudio. Este forma parte del gran bloque de hielo B15 que fue el que inició el cambio climático. Se elige este fragmento por ser el más pequeño de todos los que siguen “vivos” en ese momento y con los suficientes datos de monitorización.
Se plantea un viaje hipotético de esta pieza desde su ubicación actual siguiendo la corriente termohalina, que es la que regula el clima del planeta, llevando el frio de los polos al ecuador y el calor del ecuador a los polos, como una gran máquina termodinámica.
Pero esta es una máquina de equilibrio difícil, y en la que la variación de uno de los elementos que la compone, cambia totalmente el clima de una parte del planeta o del planeta entero. Los factores de los que depende este equilibrio son: la temperatura, la salinidad, la clorofila, los arrecifes y los pellets. Cada uno indicando un factor de salud de esta corriente y por ende del planeta.
La primera parte del viaje nos deja una visión totalmente diferente de la Antártida. Si observamos las fotografías aéreas por meses de los últimos 50 años de este lugar, dejaremos de verlo como un gigantesco bloque de hielo, para empezar a observarlo un gran ser vivo, el cual tiene una enorme masa de hielo que se va formando y destruyendo según las estaciones del año, verano e invierno, y que nos hace ver este continente como un gran territorio latente. Como si del latido del corazón se tratase.
Siguiendo los trabajos de Pierry Huyghe y Françoise Roche, se crea una montaña en dicho iceberg capa de medir los factores que condicionan la Antártida, entre ellos el viento y el hielo. Generando una montaña habitable que se va formando y derritiendo según en la franja de la Antártida en que se encuentre, hasta llegar a la salida del círculo polar antártico, donde ya no se puede formar más, y esta desaparece, quedando como residuo parte de la infraestructura de soporte que generaba esta montaña latente en un paisaje totalmente plano como era el iceberg.
Tutor: JUAN ANTONIO SÁNCHEZ MORALES (Proyectos Arquitectónicos)
