Proyecto que pretende generar una visión crítica desde una perspectiva medioambientalista en la manera de desarrollarse las grandes ciudades. ¿Qué pasaría si le diéramos la oportunidad a la naturaleza de recuperar su lugar?
Desde que me mudé a Barcelona, sentí un cambio a la hora de ver una gran ciudad, me dí cuenta del desapego total que tiene la construcción de los últimos años al medio natural, se trata de un problema global del que todo el mundo empieza a ser consciente, movimientos como el creado por Greta Thunberg hace reflexionar sobre como las nuevas generaciones son mucho más conscientes de avanzar respetando el medio ambiente, y eso, es un movimiento que también debe afectar al campo de la arquitectura y la construcción.
El trabajo está pensado como un proyecto de“deconstrucción” en el que se genera un elemento arquitectónico que pueda desarrollarse por sí mismo de manera autosuficiente, un hervidero de naturaleza que recrea las condiciones necesarias para el desarrollo de especies vegetales y animales a gran velocidad y cree un espacio de regeneración ambiental que permita la vuelta de la naturaleza al centro de la ciudad, alcanzando un punto de saturación en el que él mismo se autodestruye y acaba desapareciendo, haciendo que toda esanaturaleza, ya desbocada, se vea obligada a “devorar” eledificio que la sustenta para poder sobrevivir. Es, por tanto que se analizan los elementos, mediante otro punto de vista. Se buscan los puntos débiles del edificio, se intentan conseguir situaciones límites que desborden el artefacto, estados límite de los elementos, recrear técnicas constructivas que duren lo menos posible y utilizar materiales con una vida útil limitada.
Intervenimos sobre un edificio de 1903 en el Eixample de la ciudad, analizando el barrio y el entorno, viendo la capacidad de expansión del proyecto y su posible implantación en más edificios del entorno para conseguir una red conectada. Es un edificio que no ha sufrido reformas, y que la gran parte de sus materiales son originales y naturales, ya que se trata de un parásito arquitectónico que pretenderá ser un “acelerador de naturaleza” (ADN) y que está pensado para ser utilizado por animales y plantas. Fue necesario estudiar en profundidad especies de ambos mundos, sus cualidades, adaptabilidades, requisitos para su existencia, campo de expansión, formas de construir, materiales que usan para conseguir la implantación de las especies en una armonía con todas ellas para que puedan convivir y vivir en simbiosis. Tras la suma de las necesidades de todas ellas, y buscar redes de unión conjuntas se genera un elemento arquitectónico que imita formas naturales con geometrías fractales que se coloca en las azoteas de los edificios y que se convierte en un sistema interconectado en el que confluyen muchos usos, unas partes suministran a otras, y muchas de ellas tienen un uso compartido por varios sectores que lo requieren. Para la construcción del elemento se usarán materiales rehusados, rechazados en procesos constructivos y deshechos de la vida diaria del ser humano, que se ensamblarán entre ellos, utilizando técnicas vernáculas y tradicionales, sencillas, y que muchos de los cuales se trabajan anteriormente para transformar su estado inicial y conseguir resultados que poder aplicar al ADN y puedan servir tanto a plantas como animales, o aceleren el proceso de destrucción del mismo.
Con todo este planteamiento me imagino cómo puede ser el futuro que le espera al ser humano en su relación con el medio ambiente, y me hace tener presente que la naturaleza al fin y al cabo siempre recuperará su lugar original y que todo lo que es obra del ser humano desaparecerá, por tanto creo hipótesis de cómo podrá evolucionar esa naturaleza cuando acabemos con sus hábitos actuales y la capacidad de adaptación que tendrán en un futuro, con insectos que desarrollan su cuerpo para poder terminar devorando un edificio, alimentándose de materias primas artificiales y producidas por el humano, desarrollando extremidades, órganos y procesos vitales en unas situaciones futuras en las que el ser humano tendrá que convivir con un medio natural desbordado y que obliga a las personas a una vida de sumisión al medio natural.
Tutores: ENRIQUE NIETO FERNÁNDEZ (Proyectos Arquitectónicos) + MARÍA JOSÉ MARCOS TORRÓ (Proyectos Arquitectónicos)
