A medida que aumenta la población mundial, la demanda de agua crece dando como resultado la sobreexplotación de acuíferos. Ante esta circunstancia, se estudia el caso de la megalópolis de la Ciudad de México, en respuesta a la crisis hidrológica que sufre la ciudad y a los problemas de hundimiento que esta situación ha provocado.
El trabajo se divide en tres grandes bloques:
- Estado de la cuestión (análisis).
- Estrategias de recuperación (propuestas para resetear el modelo hidrológico).
- Desarrollo de las estrategias ubicadas en la Cuenca Baja (ríos urbanos e intervención en el futuro ex aeropuerto).
El primer bloque comienza con un acercamiento a la ciudad desde una escala territorial, explicando su crecimiento poblacional en función de su ubicación estratégica. Posteriormente se elabora un eje cronológico que señala los eventos sociales, políticos, culturales y económicos que han ido dando forma a la ciudad, grafiando la secuencia de colonización de los terrenos ganados al lago desecado artificialmente. Por otra parte se mapea la infraestructura hidrológica existente (que da lugar a una ciudad resiliente), la estructura urbana fragmentada según el modelo de ciudad latinoamericana propuesto por Bahrs y Mertins (3 etapas, 3 estructuras) y la red de espacios de transporte y de intercambio (no lugares que originan un espacio público sin identidad).
Finalmente se elabora un diagrama de controversias apoyado en el paradigma de la sostenibilidad de Scott Campbell en el que se explica la ciudad a través de las fricciones entre los ejes del desarrollo económico, la igualdad social y la protección ambiental.
El segundo bloque plantea como objetivo pasar de un modelo hidrológico lineal a uno cíclico, tomando como base teórica las propuestas de México Ciudad Futura (según las cuales la ciudad sigue siendo potencialmente un lago) y reinterpretándolas a la realidad urbana actual. Para ello se formula un catálogo de estrategias de recuperación hídrico-urbanas localizadas en los espacios de oportunidad detectados en la ciudad, planteando la secuencia de implantación.
En el tercer bloque se desarrollan las estrategias correspondientes a la Cuenca Baja, consistentes en la regeneración interna de la ciudad. Para ello se plantea la apertura de los ríos urbanos actualmente entubados, definiendo unos ejes verdes cuyo trazado cose la estructura urbana fragmentada, regenerando el espacio público e hibridando las redes de transporte metropolitanas. Estos ríos permiten conducir el agua de las escorrentías hacia el futuro ex aeropuerto, ubicado entre los dos barrios con mayor densidad poblacional y carencia de espacios públicos de referencia. Su posición en la parte más baja de la cuenca es la óptima para la inclusión de grandes masas de agua formando un ecosistema húmedo que actúe a nivel territorial. Se plantea reintroducir el agua en este futuro vacío urbano recuperando la auténtica vocación lacustre de esa porción del territorio. La intervención en el aeropuerto propone generar un búfer de servicios de alcance metropolitano conectado con los bordes de la trama urbana, reutilizando las arquitecturas aeroportuarias de grandes dimensiones dado su potencial para la formación de equipamientos públicos. En el centro se ubica un humedal urbano que actúa como un gran vaso regulador para el control de las inundaciones, cuyo nivel de agua varía según la temporada seca o húmeda, generando espacios públicos cambiantes en las cotas bajas. Finalmente se plantea dar continuidad a la trama urbana generando una estructura sobreelevada que de conexión a las zonas norte y sur, reinterpretando los esquemas tipológicos de Kisho Kurokawa generados a principios de los 60.
Tutores: JUAN CARLOS CASTRO DOMÍNGUEZ (Proyectos Arquitectónicos) + PABLO MARTÍ CIRIQUIAN (Urbanística y Ordenación del Territorio)
